La provincia de Soria, ubicada en la parte Este de la comunidad de Castilla y León, es un tesoro escondido de paisajes naturales, historia y cultura. Por ello, viajar en furgoneta por esta provincia es una experiencia para descubrir un sinfín de rincones, con la posibilidad de recorrer rincones poco transitados. Este paraíso de montañas, lagunas, castillos y pueblos medievales, ofrece numerosas paradas para realizar un viaje inolvidable.

Lo que hace de Soria un destino para recorrer en furgoneta es su diversidad de opciones. En pocos kilómetros, se puede pasar de la majestuosidad de la Laguna Negra a la tranquilidad de pueblos como Calatañazor, o adentrarse en parajes que dejan sin aliento como el Cañón del Río Lobos. Además, la provincia cuenta con multitud de áreas donde estacionar y pernoctar cómodamente, lo que facilita el viaje para los amantes de las cuatro ruedas.

En este artículo, vamos a mostrar una ruta en furgoneta por los principales pueblos de Soria. Además, hablaremos de las actividades qué hacer en Soria en invierno y verano, así como de la rica tradición gastronómica de la región.

Lugares que ver en la ciudad Soria

Soria, la capital homónima de la provincia es un destino atractivo para comenzar cualquier tour por la zona. Esta ciudad, con riqueza patrimonial, ofrece una experiencia completa para los viajeros que buscan descubrir rincones con encanto y lugares llenos de significado histórico y artístico.

Uno de los puntos imprescindibles que visitar en Soria es la iglesia de Santo Domingo, una obra artística del románico español. Su fachada, decorada con intricados relieves, es un claro ejemplo del arte medieval que caracteriza a la ciudad. Además, también destaca la iglesia de San Juan de Rabanera, que combina elementos románicos y góticos, formando un templo que irradia serenidad y espiritualidad.

En general, el casco antiguo de Soria debe recorrerse tranquilamente, aparcando la furgoneta en las inmediaciones. Pasear por sus calles permite acceder a lugares como la plaza Mayor, rodeada de edificios históricos como el palacio de la Audiencia y la casa del Común. A pocos pasos, el monasterio de San Juan de Duero, con su impresionante claustro, transporta a los visitantes a la época medieval, con su arquitectura única y su tranquilidad envolvente.

Pueblos que visitar en la provincia de Soria

La provincia de Soria es una tierra llena de lugares marcados por la historia, la cultura y los paisajes naturales. La provincia atesora una enorme variedad de pueblos para visitar. Explorar los pueblos de Soria es como viajar en el tiempo. Cada uno cuenta su propia historia, que se remontan a siglos pasados, con batallas históricas y leyendas locales que aún resuenan en sus plazas. A continuación, vamos a mostrar varios de los pueblos imprescindibles qué ver en Soria en un viaje en furgoneta.

Calatañazor

Calatañazor es uno de los pueblos más emblemáticos de Soria y un lugar que parece haberse detenido en el tiempo. Este pequeño enclave medieval, situado en lo alto de un cerro, ofrece vistas espectaculares de la comarca y una atmósfera que transporta a sus visitantes a épocas pasadas. Su nombre está vinculado a la histórica derrota de Almanzor, reflejada en la famosa frase: «Aquí perdió Almanzor su tambor».

Las casas de piedra y adobe, con sus tejados de madera, reflejan la arquitectura tradicional de la zona. Entre los principales puntos de interés destacan el castillo en ruinas, que ofrece vistas panorámicas de la zona y la iglesia de Nuestra Señora del Castillo, un edificio románico que conserva elementos góticos.

Medinaceli

Medinaceli es un pueblo que combina patrimonio histórico y cultural en una ubicación privilegiada. Su famoso arco romano, único en España, es uno de los símbolos más reconocibles del lugar y un testimonio de su importancia en la época romana. Por esto, este pueblo soriano es una parada obligatoria para los amantes de la historia y el arte.

El casco histórico de Medinaceli está lleno de encanto, destacando su plaza Mayor, rodeada de edificios renacentistas. También destaca la colegiata de Nuestra Señora de la Asunción, una iglesia de estilo renacentista que alberga importantes obras de arte, así como el palacio Ducal, que refleja el esplendor de épocas pasadas.

Berlanga de Duero

Berlanga de Duero es un pueblo que impresiona desde el primer momento gracias a su imponente castillo, el cuál domina el paisaje circundante. Esta fortaleza del siglo XV es uno de los principales atractivos del pueblo y una muestra de su rica historia. Su interior, bien conservado, permite imaginar cómo era la vida en épocas pasadas.

El casco antiguo de Berlanga de Duero es igual de cautivador, gracias a sus calles estrechas que conducen hacia su plaza Mayor. Esta plaza Mayor, que asombra con sus soportales y sus edificios históricos, es un lugar perfecto para degustar la rica gastronomía local. Además, Berlanga de Duero es una puerta de entrada al Parque Natural del Cañón del Río Lobos, un paraje natural que cuenta con infinidad de rutas de senderismo.

Vinuesa

Vinuesa, conocido como «la corte de los Pinares», es un pueblo que destaca por su cercanía a la Laguna Negra, otro de los parajes naturales más icónicos de Soria. Este pueblo combina el encanto de la arquitectura tradicional con la riqueza natural de su entorno, lo que lo convierte en un destino esencial para los amantes de la naturaleza.

El casco histórico de Vinuesa cuenta con casas señoriales que reflejan su pasado noble. La iglesia de Nuestra Señora del Pino, con su impresionante retablo barroco, es uno de los principales atractivos culturales del pueblo. Además, su proximidad a la Laguna Negra, un lago de origen glaciar rodeado de montañas y bosques, hace de este lugar una parada obligatoria en cualquier viaje por Soria.

Yanguas

Yanguas, declarado uno de los «pueblos más bonitos de España», es un lugar que invita a la calma y el descanso. Este pequeño pueblo está rodeado de montañas y valles, lo que le otorga un ambiente de tranquilidad difícil de encontrar en otros destinos. Su casco histórico, perfectamente conservado, es un ejemplo claro de la vida rural tradicional.

Entre sus principales atractivos se encuentra el castillo de Yanguas, una fortaleza medieval que domina el pueblo y ofrece vistas panorámicas de toda la zona. Las calles del pueblo conducen a la iglesia de San Lorenzo, una construcción románica que destaca por su sobria belleza.

Actividades durante todo el año

Tal y como hemos comentado, Soria es un destino que se disfruta en cualquier estación. En invierno, el paisaje nevado de lugares como la Laguna Negra o los Montes de Urbión crea un escenario perfecto para practicar senderismo o raquetas de nieve. Además, los pueblos adquieren un encanto especial con sus calles decoradas con luces navideñas y el calor de las chimeneas.

En verano, el Cañón del Río Lobos se convierte en un lugar perfecto para realizar rutas de senderismo, paseos en kayak o excursiones para la observación de aves. Asimismo, las aguas cristalinas de las pozas y ríos en la provincia ofrecen lugares para refrescarse, como el embalse de la Cuerda del Pozo, donde es posible practicar diferentes deportes acuáticos.

Gastronomía soriana – Sabores tradicionales para el viajero

La gastronomía de Soria es otro de los grandes atractivos de la provincia. Durante esta ruta en furgoneta es fundamental probar el famoso torrezno de Soria, un manjar crujiente que es toda una insignia de la provincia. También destacan los embutidos locales, como el chorizo y las morcillas, perfectos para un almuerzo rápido en la naturaleza.

Por otro lado, no es posible irse sin disfrutar de platos tradicionales como el cordero asado o los guisos de setas y hongos, especialmente en otoño, cuando la provincia celebra numerosas jornadas micológicas. Los quesos artesanales y los dulces como las yemas de Almazán son otros imprescindibles para quienes disfrutan de la buena mesa. Para descubrir los mejores lugares para comer en restaurantes sostenibles en Soria, puedes consultar plataformas como Dónde Comer Sano, que recopilan los restaurantes más destacados de la región.